En el último par de semanas Samsung México se vio envuelta en una fuerte controversia tras comenzar a bloquear celulares de la marca que no fueron adquiridos en sus canales oficiales de distribución, siguiendo los pasos de Motorola de principios de este 2023.

Fue desde el 11 de octubre que Samsung comenzó a implementar los bloqueos después de semanas de “espamear” a usuarios de los dispositivos “no homologados”, en otras palabras teléfonos celulares que no están certificados bajo las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) y no fueron adquiridos vía los distribuidores oficiales de Samsung como tiendas departamentales y operadoras telefónicas — que para el caso son las mismas operadores telefónicas como Telcel y AT&T las que venden los dispositivos dentro de las tiendas departamentales.

Después de meses de mantenerse al margen, la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) hicieron un llamado a los fabricantes de dispositivos de telefonía móvil a suspender inmediatamente los bloqueos unilaterales de equipos, ya que “bajo la forma en que se realiza, afecta derechos de los consumidores y usuarios finales”.   

Si bien ZTE comenzó a bloquear dispositivos en octubre de 2022 y Motorola en julio de este 2023, es un hecho que la mayor participación de mercado de Samsung en el país y para el caso en el mundo, contribuyó a que las quejas de usuarios pusieran presión a las dependencias mexicanas para emitir una posición oficial — ya que después de todo, bajo el marco legal actual no es ilegal adquirir un equipo sin certificación mexicana y utilizarlo en el país.

El gran problema es la implementación draconiana de Samsung y demás compañías, ya que no se limitaron a bloquear que los dispositivos se conectaran a la red celular de las telefónicas, bloquearon en su totalidad el acceso a dispositivos — como lo asevera la propia Samsung en un artículo en su sitio oficial del 13 de septiembre que exageraba a más no poder los riesgos de adquirir celulares o smartphones fuera de la republica mexicana — ya sea si la persona viajó personalmente a otro país y lo compró en ese lugar o lo adquirió por medio de una tienda en línea como Amazon, Mercado Libre o similar:

“Al bloquear tu dispositivo no podrás usar ni tener acceso a tus aplicaciones, información o herramientas. Por esa razón, es muy importante que los usuarios que reciban la notificación del bloqueo lleven a cabo el respaldo de su información”

Lo que no es difícil de ver como una violación a los derechos de los usuarios como bien apunta el comunicado de conjunto de las dependencias mexicanas:

“Sin embargo, el bloqueo absoluto de los equipos terminales bajo la forma en la cual se está llevando a cabo, afecta los derechos de los consumidores y de usuarios finales”.   

Samsung emitió un breve comunicado en el que confirman que acataran el llamado de PROFECO y del IFT a suspender los teléfonos celulares provenientes del llamado “mercado gris”, mientras hacen un llamado a buscar una solución a “la problemática que genera el mercado gris en México”. Pero al momento no han hecho declaración alguna de si reactivaran los dispositivos que han bloqueado desde el pasado 11 de octubre.

Por su lado Motorola informó que además de suspender los bloqueos, comenzará a reactivar de manera gradual, en los próximos días, los dispositivos que bloquearon desde el 27 de julio de 2023.

Mientras tanto, previo a que la PROFECO y el IFT declararán su postura en el asunto, Huawei, Xiaomi y OPPO comunicaron cada una por separado que no realizarían bloqueos a equipos adquiridos fuera de los canales oficiales de distribución en México, pero reiteran su llamado a que la gente adquiera los dispositivos de cada marca en los canales de distribución oficiales en México para evitar riesgos.

Lo cierto de todo esto es que sí, adquirir un producto como un teléfono celular o para el caso cualquier dispositivo de considerable precio, fuera del país donde se vive — implica correr el riesgo de no poder hacer valida la garantía en caso de desperfecto de fábrica